¿Te has planteado si realmente estás vivendo la vida que quieres? Mira en tu interior y encontrarás la respuesta.
La mayor parte de las personas no tienen una vida plena porqué, en el fondo, no están persiguiendo sus sueños, sino los sueños que representa que tienen que tener. Y como todos vamos hacia la misma dirección, no conseguimos sentir satisfacción ni plenitud.
Artículo redactado por Cris Ibanyez, colaboradora de feliciCat
Cuando pensamos en obtener aquello que realmente queremos, es cuando surgen todos los miedos y nos
enviamos mensajes interiores que nos bloqueen y nos paralizan. «Ya estamos bien cómo
estamos, no sea que algo nos haga tambalear» .
El cierto es que como sociedad, somos personas bastante desempoderadas». Nos sentimos
inseguras y buscamos en el exterior aquella seguridad que no tenemos la capacidad de sentir
interiormente. Vivimos la vida desde el esfuerzo y el sacrificio, desde el miedo a no poder
pagar las facturas o a no ser personas aceptadas y amadas por nuestro entorno y la sociedad.
Y creemos que es normal vivir así, que es el que nos toca y que «la vida es dura». Pero lo que no sabes es que puedes encontrar toda la seguridad que deseas en tu interior. Y la encontrarás aprendiendo gestión emocional, gestión económica y gestión del bienestar.
En primer lugar, tenemos un problema muy grande de aceptación, autoestima y de confianza en nosotros. Nos amamos tan poco, que no nos creemos que tengamos la capacidad de hacer gran parte de las cosas que realmente querríamos. Si nos conocemos, si aprendemos a aceptar quién somos y por qué somos así, podremos ser personas más seguras de nosotros. Y esto nos permitirá que no nos preocupe el que
piensen los otros.
Si aprendemos a gestionar nuestros miedos y a andar con ellas, veremos que no tenemos que luchar en contra ni nos tienen que bloquear, sino que podemos hacer muchas más cosas de las que pensamos.
Si entendemos que somos nosotros quien nos ponemos nuestras propias limitaciones y podemos cambiar nuestra mirada hacia la vida, y es cuando podremos obtener cosas nuevas.
Pero por eso hay que aprender sobre gestión emocional.
Por otro lado hay el gran tema «la estabilidad». Nos han enseñado a perseguir una estabilidad, a tener un sueldo a final de mes y a sentirnos personas seguras si lo conseguimos. Y entonces, dejamos que todo cuelgue de aquí. Vivimos el dinero desde el miedo y la escasez, pensando que cualquier cosa que tambalee en este sentido, hundirá toda nuestra vida.
Tenemos la vida en total dependencia al sueldo que recibimos a final de mes, pero no tenemos ni
idea de gestionar este sueldo que recibimos. Estamos totalmente desempoderados respecto al
tema financiero. «De esto sólo se ocupan las personas con dinero, la gente rica. Yo bastante tengo con llegar a final de mes .»
Pero si aprendemos gestión económica, veremos que tenemos capacidad para gestionar nuestras finanzas y encontrar seguridad en este ámbito. Si vemos que podemos controlar nuestro dinero, no nos hará tanto miedo no depender del sueldo actual.
El hecho de ser consciente de dónde soy y hacia dónde quiero ir económicamente hablando, me puede permitir hacer cambios en mi economía, en mi trabajo, y en mi día a día, de forma que me permita llegar allá cumplir mis objetivos.
Por eso hay que aprender sobre gestión económica.
Y finalmente hay el tema del autocuidado. Cuidar de nosotros no ha estado nunca nuestra prioridad. Normalizamos dolores, malestares, ansiedad… Normalizamos encontrarnos mal, porque tenemos demasiado trabajo al seguir el ritmo frenético de la vida. Tenemos que estar en todas partes y rápido, y vamos con el “piloto automático” puesto. Hasta que estamos peor, vamos al médico y nos tomamos algún medicamento que nos saque el síntoma. Exacto, el síntoma, no el origen del malestar.
Cuando tenemos algún tipo de molestia, nuestro cuerpo nos está avisando que algo estamos haciendo mal. Y el más importante no es curar el síntoma, sino curar el origen. Pero como no nos permitimos bajar ese ritmo frenético en el que estamos sometidos, no podemos escuchar qué nos está pasando y que podemos hacer al respecto.
Si aprendemos a gestionar nuestra salud veremos cómo es de importante el descanso, las pausas, los momentos de silencio y de escuchar como estamos. Veremos cómo es de importante alimentarnos correctamente, cuidar nuestro cuerpo por dentro y por fuera. Si nos focalizamos en nuestro interior, dejaremos de tener molestias y dejaremos de necesitar tomarnos medicamentos.
Por eso hay que aprender sobre gestión del bienestar.
Y es que, el poder lo tenemos nosotros. La seguridad, las respuestas, nuestra felicidad está en nuestro interior. Y en vez de ignorarnos y buscarlo fuera, el que tenemos que hacer es mirar adentro. Porque aquello en el que yo creo, es aquello que crearé.
Mira dentro de tí y obtendrás todas las respuestas. A continuación se expone una infografía con las principales preguntas que debes realizarte para poder dar respuesta a: ¿Te has planteado si realmente estás vivendo la vida que quieres?